Masturbation sometimes carries the weight of a certain shame or guilt, when in fact it is a powerful and profound tool for well-being! Imagine using masturbation not just to «release» tension or stress, but rather to cultivate a «deep connexion with yourself«… And now, imagine combining the calming and soothing effect of meditation on the mind and soul with the calming and soothing effect of masturbation on the body?
De la serie de entrevistas realizadas por Élise Di a Christian de La Casa Dorada.
ÉLISE:Christian, ¿puedes decirnos exactamente qué quieres decir con «Medibación»?
CHRISTIAN: Es cierto que asociar la meditación y la masturbación puede parecer incongruente a primera vista.
Cuando hablamos de meditación, se trata sobre todo del viaje interior al que nos referimos, cultivando consciencia sobre el aquí y ahora. La meditación también se trata de encontrar recursos ocultos para lograr la calma y la serenidad de la mente y el alma. Una práctica que invita a la paciencia, a la falta de juicio y a la ecuanimidad.
Por otro lado, la masturbación tiene una imagen más «sulfurosa». Es un fuerte símbolo de placer sexual. Permite la rápida liberación de una tensión interna, la descarga de un desbordamiento de energía que puede estar vinculado ya sea a una fuerte excitación, esto es energía positiva, o al estrés cuando la energía está desequilibrada o bloqueada.
Juntas, estas prácticas tienen un enfoque holístico para conectarse con unx mismx, combinadas en una forma de placer calmante y enriquecedora. Es un enfoque espiritual para el despertar de todos los sentidos.
Sin embargo, como en la meditación, hay una búsqueda de satisfacción o apaciguamiento, un retorno a la calma. El cuerpo busca restablecer un equilibrio que se encontrará liberando esta tensión a través de la masturbación, proporcionando un orgasmo de mayor o menor intensidad.
¡Ahora imagina hacer un puente entre estas dos prácticas! Imagina combinar el efecto calmante y tranquilizador de la meditación en la mente y el alma con el efecto calmante y tranquilizador de la masturbación.
Juntas, estas prácticas tienen un enfoque holístico para conectarse con unx mismx, combinadas en una forma de placer calmante y enriquecedora. Es un enfoque espiritual para el despertar de todos los sentidos.
ÉLISE: ¿Pero no crees que será difícil para muchos salir de la función primaria de la masturbación?
CHRISTIAN: De hecho deberíamos preguntarnos: ¿por qué nos masturbamos? ¿Y por qué lo hacemos casi siempre de la misma manera, y muchxs de nosotrxs, con MUCHA frecuencia?
Es importante mencionar que para muchas personas, la sexualidad se descubre primero a través de la masturbación. Y un niñ@/adolescente, chico o chica, que comienza a descubrir su cuerpo, instintivamente se aislará, se esconderá y practicará la masturbación de prisa y corriendo.
La masturbación y el placer carnal siguen siendo en gran parte tabú. Para muchxs de nosotrxs, la sexualidad está mezclada con vergüenza y culpa.
¿Por qué sucede esto? Porque pueden sentir vergüenza o culpa, de que no está bien. Vemos allí toda la carga del condicionamiento ya sea social, educativo, religioso, etc… del que la mayoría de las veces no somos conscientes en lo absoluto.
Por ejemplo, la cultura cristiana, que veía el placer del cuerpo como una distracción de la devoción que se debe tener a Dios. Esto ha impregnado fuertemente la sexualidad con una imagen negativa. La masturbación y el placer carnal siguen siendo en gran medida tabú. Para muchxs de nosotrxs la sexualidad se relacionan con sentimientos de vergüenza y culpa, que surgen muy a menudo en los talleres de Sexualidad Consciente que organizamos.
ÉLISE: ¡De hecho aquí es donde sería interesante «redefinir» la función primaria de la masturbación!
CHRISTIAN: ¡La masturbación es de hecho una poderosa y profunda herramienta para el bienestar!. Desde el momento en que la usamos no para soltar la tensión y el estrés, sino para cultivar mejor la energía..
Así que parece bastante coherente asociar un enfoque meditativo a la masturbación, combinando los efectos beneficiosos de la masturbación y la meditación. Y al mismo tiempo, para hacer de la meditación una práctica más integradora y lúdica…
El propósito de la meditación es disminuir la velocidad, tomar un descanso, darse tiempo, centrarse, calmarse, estar presente en el momento…
El propósito de la Meditbación es disminuir la velocidad, tomar un descanso, darse tiempo, centrarse, calmarse, estar presente en el momento, combinando el placer del cuerpo y de los sentidos. Es invitar a la curiosidad, sin juzgar, dándose permiso para estar presente en el momento y en el cuerpo al mismo tiempo.
Este es el aspecto nutritivo de la Meditbación, cultivando la energía, en armonía y paz.
ÉLISE: ¿Tienes alguna recomendación en particular para esta práctica?
CHRISTIAN: Tengo 7 recomendaciones para practicar la Meditbación:
Los beneficios de la Meditbación son múltiples, ya hemos hablado de ella al principio de este artículo, pero yo diría que el mayor beneficio es lograr un mejor control de la propia energía, activarla, hacerla circular y canalizarla.
Es practicando la Meditbación diariamente que en sólo dos meses, me convertí en multiorgásmico. Al poder disociar el orgasmo y la eyaculación (orgasmos no eyaculatorios) y determinar a voluntad, la posibilidad de eyacular o no, e incluso de controlar ciertas variaciones de la eyaculación. Volveré a hablar de ello posiblemente en un futuro post.
La Meditbación aboga por la lentitud y la plena conciencia del propio cuerpo y del propio placer.
También podremos hablar de asociar la Meditbación con la práctica de la «Órbita Microscópica«, de los Taoístas, y que aprendí del Sr. Mantak Chia, el gran Maestro del Tao Sexual. Esta asociación permite, de nuevo con un poco de práctica regular, redefinir completamente la escala de placer, para tener orgasmos mucho más duraderos y intensos y profundos.
En lugar de ir directamente al grano sin tomarse el tiempo de captar lo que nos hace «despegar», la masturbación meditativa, la Meditbación, aboga por la lentitud y la plena conciencia del propio cuerpo y del propio placer.
Para cerrar, me gustaría añadir esta cita que guardo erca de mi corazón:
